Hilarante historia. Chistosa, anecdótica, con la justa cuota de realismo mágico. Hubo una carcajada final. Me despedí y me bajé del escenario. Me sentía más contento que corpóreo del Dr. Simi. Después del trabajo bien hecho, me fui a la barra.
- "Mozo, una cerveza"
- "Ocurrente el culiao" - me respondió el barman - "Ibai re bien re conchetumadre y te haci el chistosito. Ocurrente el culiao. Cántate tomo pa no enamorarme ahora po, saco weas, re weon"
Si bien era bien roto, era la siguiente que se me había ocurrido.
- "Una mierda de rutina hiciste feo culiao"
De verdad, chascón, cansado, sudado y con una cerveza me debo haber visto bien feo. Espero que no culiao.
- Ahí está tu cagá de chela maricón mongólico culiao, huevetas.
Bien poco acorde a nuestros tiempos la talla, pero qué le voy a hacer.
- "Hey! respeta a los maricones" - gritó un amigue por ahí
- "Y a los mongólicos!" - gritó un asiático
- "Y a los culiaos!" - gritó un amigo mío
- "Y a los huevetas!" - gritó Arturo Frei Bolivar
- "Y a los feos!" - gritó Adrián chupando un limón.
- "¿Qué fue de los dados negros?" - Le pregunté a Adrián
- "Vámonos, Escabeche. Nunca había visto tanta caca junta."
Bodoque tenía razón. Me sentía weon.
- "Uno como usted!" - me gritó Frei Bolivar
Nos fuimos. Tomamos una micro, rara. Una cumbia deplorable, un coro desganado, un ambiente pixelado y una clientela diversa.
- "Bien rara la micro, amigo rojo" - le dije a Bodoque.
- "Amigo rojo? Compañero?"
- "No no no, el weon es rojo"
- "COMPAÑERO!"
- "Es literalmente rojo"
- "De pie, cantar, que vamos a triunfar..."
A la mierda. Me puse a cantar. Después de eso vino una intensa asamblea improvisada. Cerramos las ventanas de la micro para no llorar.
- "Veamos lo que ha hecho la economía capitalista neoliberal a los sueldos de los trabajadores" - comenzó a interpelar un compañero por ahí. "Estamos en números rojos"
- "Rojo?"
- "Compañero?"
- "De pie, cantar, que vamos a triunfar..."
Después de 5 minutos volvimos al tema.
- "Necesitamos a alguien que sepa de trabajo. Alguien que logre guiar a este país"
- "Velasco" - propuso un minero, que iba en la micro, en pleno Santiago, no sé para dónde.
- "Andrés Velasco? no funcionó"
- "No, el otro"
- "Cuál otro?"
- "No puede. Está funado. No pagó las imposiciones"
- "Chuuu..." - dije
Estuvimos harto rato tirando nombres. La micro llegó a la garita. El chofer se bajó, cagó, volvió, partió. Seguíamos tirando nombres. Ya estábamos en un terreno bizarro.
- "Y la Paty Maldonado?"
- "Jaaaaa" - dije
- "Y Karol Dance?"
- "Cuek" - dije
- "Y Farkas"
- "Ufff..." - dije
- "Y Marcelo de Cachureos?"
- "Tu turu tu...." - dije
No sé porqué esa última frase causó gracia. Después de eso, nombre tras nombre que decían todos repetían "Tu turu tu". Me cabrié. Me bajé de la micro. Bodoque me acompañó. Otro tipo de lentes oscuros dobló a la derré y se fue también.
Bien raro todo. Nos fuimos alejando, y seguíamos escuchando el "Tu turu tu", a lo lejos. No pensaba terminar mi día con discusiones políticas. Bodoque ya estaba azul, así que decidió irse. Hice lo mismo.
Llegué a mi casa y me acosté. Encendí las noticias. El bus chocó, menos mal que me bajé. Testigos dicen que capotó, que hizo "Tu turu tu".
Llegué a mi casa y me acosté. Encendí las noticias. El bus chocó, menos mal que me bajé. Testigos dicen que capotó, que hizo "Tu turu tu".
Después de las noticias venía el Morandé, el Morandé con Compañía, donde muestran los potitos ah!, las tetitas ah!. Ahí las tallas de los coquitos ah!, de la pichula, de la cintura pa abajo ah!, ah!. A mi señora no le gustó el tono con que hablaba. Menos a mi suegra. Necesitamos otra pieza ya parece...
Tiempo de elecciones, venía la franja presidencial
- "Pero qué mierda, esa frase es mía!"
- "Hay, no sea alaraco mijo" - me dijo mi suegra.
- "Qué simpático este Allamand, se nota que es del pueblo" - dijo mi señora. Meses después nos divorciamos. Es difícil de explicar...
Me puse furioso. El "tu turu tu" era mío. Yo lo inventé. No sé cómo supo Allamand, pero lo estaba usando, y era mío! No lo podía soportar. Pero no podía hacer nada. Dos combos en los cocos y a dormir. Na que ver culear frente a la suegra.
Me tomó años superar este plagio. Pero estaba seguro que con la era de internet se iba a empezar a saber quién decía las cosas, quiénes eran los autores originales.
Un día se me acerca mi sobrina:
- "Viste esto?"
- "Qué es?"
- "Un tiktok. De un político viejo. Arturo Frei Bolivar creo que se llama. Es re chistoso, mira"
- "... y habían gotitas de mierda hasta el colectivo"
El concha de su madre. Salió electo. Uno como yo.
